La vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez expresó un enérgico discurso este viernes en el que afirmó haber sido víctima de exclusión y racismo durante su paso por el Gobierno de Gustavo Petro.
En su aparición pública durante la Conmemoración del Día Internacional de las Mujeres y las Niñas Afrodescendientes en la ciudad de Cali, Valle del Cauca, mencionó que la cohibieron de realizar actividades pidiéndole respeto, además, de asociar su color de piel con actividades ilegales, según reportes de varios medios locales.
“Hace algunos años fui la voz que recorrió el país, fui la cara de la esperanza. La mujer afrodescendiente que traía el eco de los ríos, de las casas humildes, de los saberes populares, de las manos callosas, de las mujeres que limpian las casas ajenas mientras sueñan con una vida digna. Pero pronto pasé de ser el fenómeno político, la heroína, a ser la ‘traidora’”, declaró.
No dudó en expresar su inconformidad con respecto a la forma en la que llegó a apoyar un proyecto que aseguraba ser del cambio y poco a poco su imagen e importancia se fue desdibujando, tal como lo aseguró Francia:
“Somos útiles para ganar elecciones pero no para gobernar. Se nos quiere en la foto, pero no en la toma de decisiones, se nos quiere obedientes y si no que obedecemos viene el castigo, la violencia política, la deshumanización pública”.
Habló sobre las críticas que le han hecho por su labor con el Ministerio de la Igualdad, asegurando que no le dieron los instrumentos para poder cumplir con lo que le exigían.
“Me dieron la misión de crear una institución sin estructura, sin recursos, sin apoyo. Me dijeron: ‘Hazlo tú’. Y cuando argumenté que tres viceministerios eran muchos, me exigieron cinco. Lo hice, a pesar del bloqueo sistemático. Me acusaron de no ejecutar, cuando jamás me entregaron el instrumento para hacerlo. Se promovió la idea de que como soy negra, seguro robo. Sin haber tocado un peso, me trataron como criminal. Porque el color de mi piel, tristemente, para muchos, ‘me hace culpable’. Me exigieron ser sumisa. Cuando exigí respeto, me llamaron arrogante. Poco a poco, lo que se me dijo en privado se va haciendo público”, sentenció Márquez.